Así es el Ferrari 250 GTO, el coche más caro del mundo
El famoso batería de Pink Floyd, Nick Mason, es propietario de uno de ellos, como afirmó en La Resistencia
El pasado lunes, el baterista, escritor, productor y piloto de automovilismo Nicholas Berkeley Mason visitó La Resistencia. Durante el famoso programa de Movistar+, presentando por el humorista David Broncano, promocionó la nueva exposición del histórico grupo en IFEMA. Tras casi 50 años, decidió abandonar Pink Floyd y ahora, con 75 años, disfruta de un garaje envidiable. Entre sus mayores tesoros se encuentra un Ferrari 250 GTO de 1962, uno de los coches más históricos del mundo. Debido a que solo podemos encontrar entre 20 y 30 unidades en todo el mundo, el precio de uno de ellos puede ascender a 40 millones de euros.
Nick Mason, el flamante entrevistado del programa, no es un simple propietario de esta obra de arte. Admite conducirlo periódicamente e, incluso, “hacer trompos” con él. Una práctica sorprendente, tanto por la edad del músico como por la delicadeza del vehículo del cavallino rampante.
Ferrari 250 GTO, una joya sobre ruedas
Solo se fabricaron 36 unidades de este modelo legendario de dos puertas. Con 1050 kilogramos de peso, este bólido fue creado para correr, gracias al motor V12 3.0 de 5 velocidades. Este monstruoso propulsor, escondido bajo un capó alargado, aporta hasta 302 CV. Su velocidad máxima alcanzaba los 280 kilómetros por hora y fue pilotado en competiciones por grandes manos, como las del campeón del mundo de Fórmula 1 Phill Hill. Fue ganador del campeonato del mundo tres años seguidos, entre 1962 y 1964.
Debido a su reducida producción, su valor ha alcanzado niveles insospechados. En 2013 se vendió un ejemplar por 38 millones de euros. En 2018 se vendió otra unidad por la estratosférica cifra de 80 millones de euros. Además, en el mismo año, se convirtió en el vehículo más caro vendido en subasta pública. Alcanzó los 48 millones de dólares en una subasta en Monterrey, California.