El SEAT Ateca se actualiza con un completo ‘restyling’
Las principales novedades llegan en el aspecto estético y tecnológico
SEAT ha decidido darle un soplo de aire fresco a su SUV más vendido, el Ateca. Con más de 300.000 unidades vendidas -de las cuales 60.000 se llevaron a cabo en territorio nacional- desde su lanzamiento al mercado en el año 2016, este crossover español ha pasado a ser una de las referencias dentro del segmento C-SUV junto a modelos de la talla del Nissan Qashqai o el Peugeot 3008.
Cuatro años más tarde llega este restyling de mitad de vida comercial, con novedades en su diseño -interior y exterior-, dotación tecnológica, catálogo de mecánicas e incluso con un nuevo nivel de equipamiento denominado XPERIENCE.
En lo que respecta a su diseño exterior, el frontal se ha adaptado a los patrones establecidos por los Tarraco y León e incluye ahora una nueva parrilla y unos faros más estilizados que se sirven de tecnología LED. La parte posterior no presenta apenas cambios, destacando la nueva tipografía para el logo ‘Ateca’ ya utilizada en el nuevo León.
En el habitáculo se ha incluido un nuevo volante de diseño más actual, mientras que los diferentes materiales componen el salpicadero se han mejorado para ofrecer una mayor sensación de calidad. El cuadro de instrumentación digital cuenta con una pantalla de 10,25 pulgadas, mientras que el sistema multimedia se sirve de una pantalla táctil central de 8,25 o 9,2 pulgadas en función de la versión.
La gama de acabados se completa con la llegada del equipamiento XPERIENCE, que dota al Ateca de un aspecto más ‘offroad’ con la inclusión de molduras de plástico negro en los pasos de ruedas, paragolpes específicos y diferentes añadidos en aluminio que cumplen la función estética de protecciones.
Por último, SEAT ha optimizado la eficiencia de sus propulsores de gasolina y diésel, si bien aún no existe la posibilidad de equipar mecánicas híbridas o microhíbridas. Las opciones de gasolina parten de un 1.0 TSI de tres cilindros con 110 CV, seguido por un 1.5 TSI de 150 CV y un 2.0 TSI de 190 CV. Por su parte, las dos opciones de gasóleo se basan en un bloque 2.0 TDI de 115 o 115 CV. Las mecánicas más potentes de ambos combustibles pueden asociarse al sistema de tracción total 4Drive y a la transmisión automática de doble embrague DSG.