Batería de litio metal: un paso prometedor

Un avance revolucionario en la tecnología de baterías de litio metálico
La gigante de las baterías, CATL, anuncia un importante progreso en la tecnología de baterías de litio metálico (LMB) gracias a la cartografía cuantitativa. Este avance permitirá a las baterías LMB tener una alta densidad energética y una vida útil excepcionalmente larga. El prototipo optimizado de esta nueva batería ha logrado una duración de 483 ciclos y podría integrarse en proyectos reales para alcanzar una densidad energética superior a 500 Wh/kg, superando a las más recientes baterías de estado sólido que alcanzan una densidad energética de 375 Wh/kg.
La densidad energética de una batería es la cantidad de energía que puede almacenar por unidad de peso. Este es un parámetro fundamental para el transporte: almacenar más energía en el mismo espacio significa mayor autonomía, dimensiones más compactas y menor peso. Según CATL, este avance representa «un paso significativo hacia la viabilidad comercial para aplicaciones como vehículos eléctricos y aviación eléctrica».
El problema del electrolito salino
Las baterías LMB han sido ampliamente consideradas debido a su alta densidad energética natural, lo que las hace particularmente adecuadas para automóviles diseñados para viajes largos o incluso para aviones eléctricos. Sin embargo, su defecto es su vida útil relativamente corta, lo que las hace menos adecuadas para uso comercial. Para superar este problema, CATL anuncia que ha desarrollado y perfeccionado una serie de técnicas analíticas para monitorear la evolución del litio activo y cada componente electrolítico durante todo el ciclo de vida de la batería.
De esta manera, se ha logrado revelar los «caminos de agotamiento críticos» que determinan la degradación de las celdas. El equipo de investigación descubrió que el culpable es el continuo consumo de la sal electrolítica LiFSI, que se consume en un 71% cuando la batería se agota. Por lo tanto, para CATL es esencial enfocarse en la vida útil del electrolito para lograr un rendimiento duradero.
Doblando la vida útil
Gracias a estas observaciones, CATL ha optimizado la formulación del electrolito, introduciendo un diluyente de bajo peso molecular, que ha aumentado la fracción de masa de la sal LiFSI, mejorando al mismo tiempo la conductividad iónica y reduciendo la viscosidad sin aumentar la masa total del electrolito. Este cambio ha duplicado efectivamente la vida útil del prototipo.
Según CATL, «este avance inicia un cambio de paradigma en el desarrollo de baterías de alta densidad energética y construidas para durar». Sin duda, este es un gran paso para la industria de la automoción y podría revolucionar la forma en que vemos y usamos los vehículos eléctricos.