Productores de componentes para autos: desde 2020 se han perdido 86.000 puestos de trabajo.
Según un reciente informe de la Asociación Europea de Proveedores del Sector Automotriz (Clepa), el Viejo Continente ha sufrido una drástica pérdida de empleos en el sector automotriz desde 2020, con la desaparición de 86.000 puestos de trabajo. Alemania ha sido uno de los países más afectados, con casi el 60% de estos “recortes”, equivalentes a 52.000 posiciones.
La demanda disminuye y la producción se encarece
El informe también revela que en los primeros seis meses de 2024 se anunciaron otros 32.000 recortes de empleos, superando incluso el peor período de la pandemia, cuando se anunciaron 29.000 recortes en la segunda mitad de 2020. Estas reducciones se deben a una disminución de la demanda, un aumento en los costos de producción y un retraso en las inversiones en nuevas tecnologías.
Un resquicio de esperanza
La rentabilidad de la industria de suministro sigue siendo insuficiente para soportar las inversiones necesarias para la transición verde y digital de la industria automotriz europea. Sin embargo, el informe de Clepa también destaca una tendencia interesante: la creación de 29.000 nuevos empleos, 19.000 de los cuales están en el sector de los automóviles eléctricos.
El desafío de la competencia asiática
Las drásticas reducciones de recursos humanos en el mundo de los componentes se encuentran en el contexto de una situación económica contingente para la industria automotriz europea, que tiene que enfrentar la presión de la competencia asiática y, al mismo tiempo, proponer modelos que cumplan con nuevos y rigurosos estándares normativos anticontaminantes. Como resultado, toda la cadena de suministro se encuentra bajo una condición de estrés para alcanzar los ambiciosos objetivos ecológicos y digitales.
La conclusión
En resumen, la industria automotriz europea se enfrenta a numerosos desafíos, desde la pérdida de empleos y la disminución de la demanda hasta el aumento de los costos de producción y la necesidad de invertir en nuevas tecnologías. Sin embargo, el crecimiento en el sector de los automóviles eléctricos ofrece un rayo de esperanza para el futuro.