Trump: aranceles del 25% para todos los autos producidos fuera de los Estados Unidos.

En un giro sorprendente de los acontecimientos, Donald Trump ha anunciado que a partir del 2 de abril de 2025, todos los vehículos producidos fuera de los Estados Unidos se verán sujetos a un arancel del 25%. Este nuevo arancel se sumará a la ya existente tasa del 2,5% sobre los vehículos de producción extranjera, así como a la del 25% sobre los denominados «vehículos ligeros», es decir, los vehículos comerciales que pesen hasta 3.860 kg.
El Impacto de la Nueva Tarifa
Esta medida afectará a aproximadamente la mitad de los vehículos vendidos en los Estados Unidos, es decir, cerca de 8 millones de vehículos cada año. Según la administración de Trump, el objetivo es que los fabricantes trasladen la producción a territorio estadounidense. «Todos aquellos con instalaciones en Estados Unidos se beneficiarán. Creo que nuestra industria automotriz florecerá como nunca antes», afirmó el mandatario, amenazando con nuevas medidas si el resto del mundo se une en contra de Estados Unidos con medidas de respuesta.
El Efecto en los Precios de los Vehículos
Si bien el objetivo de estos aranceles es estimular la producción nacional, muchos analistas coinciden en que esto podría poner en riesgo las finanzas de las empresas automotrices, incluyendo aquellas que producen en los Estados Unidos, ya que dependen de cadenas de suministro globales. En la práctica, esto podría llevar a un significativo aumento en los costos para los conductores estadounidenses, con algunos estimando un incremento promedio en los precios de los vehículos entre 5.000 y 10.000 dólares.
Impacto en las Acciones de las Compañías Automotrices
No es sorprendente que, incluso antes del anuncio oficial, la bolsa de Wall Street registrara fuertes pérdidas, mientras que las acciones de las empresas automotrices – desde General Motors hasta Stellantis – se desplomaron. No sólo las marcas extranjeras se verán afectadas por los nuevos aranceles, sino también las estadounidenses como GM o Ford, que producen una buena parte de sus vehículos vendidos en el mercado local fuera del país. Además, cabe destacar que el 60% de los componentes proviene de fuera de las fronteras estadounidenses.
Europa Dispuesta a Negociar
La producción automotriz europea, que ve a los Estados Unidos como su principal mercado de exportación, se verá particularmente afectada. Ante esto, la presidenta de la Unión Europea, Ursula von der Leyen, manifestó su descontento con la decisión tomada por Estados Unidos: «Los aranceles son impuestos: dañinos para las empresas, peores para los consumidores, en los Estados Unidos y en la UE». A pesar de ello, von der Leyen promete que Europa «continuará buscando soluciones negociadas, protegiendo al mismo tiempo sus propios intereses económicos».